El perro pomeranian hongkonés que, después de someterse a pruebas orales y nasales, diera positivo a COVID-19, aunque en niveles bajos, falleció, días después de haber sido liberado de la cuarentena a la que había sido impuesto.
El animal fue sometido a pruebas confirmatorias y posteriormente declarado libre de coronavirus, por los que los veterinarios permitieron que la mascota regresara a casa junto con su dueña, una mujer de 60 años que fue dada de alta, luego de haberse recuperado de la enfermedad.
Sin embargo, aunque, a petición de la dueña no se le realizó una autopsia al animal para determinar la causa del fallecimiento, el perro, que tenía 17 años, superaba la expectativa de vida que se le da a la especie, que encuentra entre los 12 y los 16 años como máximo. Así lo informó la mujer al Departamento de Agricultura, Pesca y Conservación de Hong Kong.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), este perro ha sido el único animal registrado con un diagnóstico positivo de coronavirus, pues no se ha informado de otro caso similar que involucre a un animal de compañía.
De otra parte, a pesar de que, al inicio de la propagación del virus algunas teorías esbozadas por los científicos apuntaban a que la enfermedad se transmitió inicialmente de un animal a un ser humano, estas fueron desmentidas por la OMS, ya que no existe evidencia que avale que el coronavirus se haya transmitido ni por murciélagos ni por el pangolín, como se creía inicialmente.
Tampoco hay evidencia de que el COVID-19 pueda ser transmitido por picaduras de mosquitos o de otros insectos, por lo que, por el momento, se mantiene que la única forma de contagio de la enfermedad es por vía respiratoria, a través de las gotas que producen los portadores cuando tosen, estornudan o hablan.
Estas secreciones contienen partículas del virus que pueden contagiar a personas o depositarse en objetos y superficies hasta a 6 pies de distancia.
Por ello, las autoridades han insistido en que la forma de detener el contagio es lavándose las manos con agua y jabón por, al menos, 20 segundos, practicar el distanciamiento social, esto es, mantener una distancia de entre 3 y 6 pies personas; y evitar salir a lugares públicos, mientras sea la recomendación oficial del gobierno.