En esta edición de Boripet llegamos a Cidra donde nos encontramos con una nube, pero esta no es cualquier nube, sino que es una simpática oveja… ¡sí, una oveja! Su dueña, Julymar Figueroa, contó que, como regalo del Día de las Madres, le pidió a su esposo una cabrita enana, pero cuanto este se dio a la tarea de buscarla encontró que eran muy costosas.
“Pasaban los días y se acercaba el Día de las Madres, fue entonces que su papá consiguió dos ovejas bebés y le ofreció una a mi esposo, para que me la regalara y fue así como mi esposo llegó con Nube y me dijo: ‘mi amor, esto fue lo que trajo el barco, una oveja’”, dijo, divertida. Sin embargo, a pesar de que no era la cabrita enana que esperaba, ver a Nube fue amor a primera vista.
“A mí no me importó; yo me enamoré de ella desde el primer momento en que la vi. Nube llegó a nuestro hogar cuando tenía 3 meses de nacida, la críe en el laundry de la casa, del cual se fue apoderando y ahora piensa que es de ella”, comentó entre risas, mientras habló de los cuidados de su inusual mascota.
“Las ovejas son unos animales muy dóciles y es posible adoptar a una como mascota, ya que es muy fácil acoplarse a una. Como la mayoría de los animales, la oveja es un animal con buena capacidad de aprendizaje, apegado a los humanos y con buena memoria. Solo hay que cumplir con las condiciones adecuadas para darles una buena vida y el cuidado necesario”, destacó Julymar, quien agregó que la alimentación de Nube es bastante simple, pues únicamente come alimento para ovejas y heno, aunque lo más importante es tener agua limpia para ella.
“Nube ya tiene un año con nosotros y cada día es más cariñosa, graciosa e inteligente, y le encantan los niños. Mi momento más feliz fue cuando me la trajeron bien bebecita”, admitió conmovida, al aceptar que esta tierna ovejita ha cambiado su vida.
“Es una responsabilidad más y aunque uno piensa que una oveja no necesita mucha atención, no es así, la realidad es que, al ser criada como una mascota, ella necesita atención. Igual que un perrito, a ella le encanta que la añoñen y si pasa mucho tiempo sin salir de su espacio, ella, busca la manera de salir para estar un rato con nosotros dentro de la casa. Creo que no es difícil la crianza de una oveja, cuando la crías normalmente, pero cuando se cría como mascota sí es difícil por toda la atención que hay que darle”, explicó Julymar.
Como ocurre con cualquier mascota, en el proceso de crianza, hay algunas situaciones que requieren más atención y el caso de Nube, no es la excepción.
“Para mí, la parte más difícil diría que ha sido tratar de enseñarle que ella tiene que estar en su espacio y que no es un perro que puede estar suelto todo el tiempo”, expresó.
Julymar aseguró que, para ella, en los últimos años los humanos han cambiado su forma de pensar hacia los animales. , adujo.
Por último, les aconsejó a las personas que están buscando mascota que, si tienen el espacio, se den la oportunidad de criar un animal diferente a un perro o a un gato. “¡No se van a arrepentir… yo amo a mi Nube como amo a mi perrita!”, exclamó.